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El otoño es el periodo ideal, para comprobar si nuestras ventanas conservan sus propiedades. Merece la pena hacerlo, no solamente para evitar los costes de posibles defectos en periodo invernal, sino también, para evitar el aumento de costes de calefacción.

Una inversión que se recupera rápidamente

El cambio de ventanas en toda la casa puede ser muy costoso, incluso, si optamos por ventanas de parámetros estándar. Si nos decidimos montar ventanas de bajo consumo, el coste aumentará aún más, aprox. un 20%.

No obstante, esta inversión se recupera rápidamente. Unas ventanas nuevas protegen la casa, evitando las pérdidas de calor, además, pueden obtener este calor. Gracias al uso de acristalamientos adecuados, podemos captar la energía solar gratuita, para calentar el interior de la casa.

Una reforma eficaz del aislamiento térmico permite reducir los gastos de energía, en un 50% aproximadamente. Solamente el reemplazamiento de ventanas viejas, con unas ventanas más estancias y bajo coeficiente de transmitancia calorífica, permite reducir el consumo de energía en un 25%. Pero hay más ventajas aún – además de reducir los gastos de calefacción, protegemos también el medio ambiente, reduciendo la emisión de gases de efecto invernadero. Optando por una modernización del aislamiento térmico de la casa, podemos recurrir al apoyo financiero, consistente en una bonificación al montaje de aislamiento térmico. Esta bonificación se concede a partir del Fondo de Aislamiento Térmico y Reformas y cubre un porcentaje importante de los costes de renovación de la casa. Esta cantidad resulta importante, teniendo en cuenta el coste total de la inversión.

¿Cuánto ahorraremos, si no nos decidimos a cambiar las ventanas obsoletas?

La legislación polaca determina un valor máximo de coeficiente de transmitancia térmica Uw para ventanas, a nivel de 1,8 W/m²K. Las carpintería de estos parámetros deja escapar gran cantidad de calor. En tan solo un mes, este tipo de ventana deja pasar hasta 54 kWh de energía, teniendo en cuenta, que la temporada de calefacción dura unos 7 meses. Resulta fácil calcular que, en un año, podemos perder hasta 378 kWh. ¡Esta cantidad de energía sería suficiente para alimentar un hervidor de agua eléctrico, durante 4 años! Habitualmente, nuestros hogares están equipados con calefacción por gas o carbón – el coste de generación de 1 kWh de energía, a partir de estas materias primas, asciende a aprox.. 0.20 pLN. En consecuencia, en la temporada de calefacción, perdemos varias decenas de zlotys, teniendo en cuenta, que éstos cálculos se aplican a una sola ventana.

¿A qué debemos prestar atención, al elegir la carpintería para nuestro hogar?

Montando una carpintería de bajo consumo, limitamos la pérdida de calor y ahorramos dinero. Los modelos disponibles en nuestro mercado varían en función de la calidad, precio y aspecto, pero generalmente, cada ventana se compone de un perfil de PVC, un paquete de acristalamiento y herrajes. Debemos prestar especial atención a estos elementos. Además, el montaje correcto es muy importante, porque es la garantía de que la ventana conserve sus propiedades utilitarias durante largo tiempo.